Podemos, la formación morada cuyo máximo representante Pablo Iglesias es hoy el Vicepresidente del Gobierno, decidió silenciar a las víctimas de Kote Cabezudo. Ocurrió cuando uno de los miembros del círculo de la capital donostiarra propuso poner a disposición de las perjudicadas la sede del partido. Se trataba de darle voz a más de 30 años de violaciones, corrupción de menores y producción y difusión de pornografía infantil.
Estremecedor el testimonio del guipuzcoano Félix Leis, representante del comité electoral de la candidatura Nuevo Impulso, que lidera el toledano Fernando Barredo y que se presenta a las primarias de Podemos frente al Vicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias. Un proceso de primarias que se está celebrando (y votando mientras leen estas líneas) con la nocturnidad, ausencia de garantías y apagón informativo del más puro estilo bolivariano. Al gusto del Marqués de Galapagar. Pueden ver la entrevista al completo con Félix Leis en el canal de youtube de nuestro director: Miralles Press
Lo que cuenta Félix Leis es gravísimo. Mariví Eizaguirre, responsable de feminismos de Podemos Donosti, por orden de Eukene Arana a su vez responsable de feminismos de Podemos Euskadi y parlamentaria vasca, niega a docenas de jóvenes mujeres vascas el poder contar su calvario de violaciones y pornografía infantil en la sede de Podemos Donosti porque… «Lo siento, no nos podemos meter en este asunto porque tiene temas políticos. No pueden venir a la sede»
Y ciertamente el Caso Kote Cabezudo tiene temas políticos porque el diputado socialista Odón Elorza fue señalado por un testigo protegido como pieza fundamental en la estructura de captación de niñas de las que luego abusaba sexualmente el fotógrafo vasco. Vomitivo el proceder de estas dos mujeres, supuestas adalides del feminismo, ¿no les parece?
Podemos, el poder y el feminismo
La lista de mujeres con poder en sus ámbitos profesionales que han pisoteado por acción u omisión la dignidad de las víctimas de Kote Cabezudo es interminable. Ana Isabel Pérez Asenjo, Carmen Rebollo, Susana Griso, Lourdes Pérez, Carolina Bescansa… ahora sabemos que también Mariví Eizaguirre y Eukene Arana.
Miren sus caras y háblenme ahora de sororidad, o de «Hermana, yo te creo», o de «Metoo»… Repasen sus currículums y cuéntenme eso del patriarcado, o lo de «ni una menos», o explíquenme lo de los Pactos de Estado, o lo de legislar en género…
¿Todavía no se han dado cuenta de que el único feminismo real somos la inmensa mayoría de la población? Todos los que creemos en la plena igualdad de hombres y mujeres en derechos y obligaciones. Llevo ya demasiados años luchando en el frente, en primera línea de combate, en las trincheras donde las balas te silban en los oídos. Y tristemente ya solo puedo atestiguar que el feminismo institucional es una gigantesca patraña. Una performance de dimensiones mastodónticas para alimentar un negocio de lo más lucrativo. Y si una mujer violada o una víctima de pornografía infantil supone una amenaza para las dueñas del chiringo, será pisada y aplastada como una cucaracha. Sin miramientos. Sin rastro de empatía. Y el pie sobre el cuello de la víctima pertenecerá a las mismas que se golpean el pecho en nombre del feminismo y de la mujer.
Yo sólo he conocido una clase de violencia de género. La del género poderoso. La de quien ejerce la violencia porque puede. Y el género poderoso, creánme, no distingue a hombres de mujeres.
Soys unos heroes,gracias eternas por vuestta gran labor! No podemos seguir confiando en este estado!
Brutal documental en Netflix sobre este infraser, brutales las chicas, valientes! Y brutal la gentuza de podemos. Afortunadamente, podemos ha desaparecido del mapa electoral 🙂