Que la historia se repite, es algo que sabíamos casi todos. Sin embargo, muchos no quieren ver que en España estamos regresando no solo a la dictadura sino también a un escenario de penuria económica provocado porque algunos quieren controlar todos los resortes del poder. Las penas sin pan van a ser muy amargas. El progresismo de Sánchez nos lleva de cabeza al Frente de Juventudes, Sí, aquel organismo político-administrativo creado por la FET y de las JONS para el encuadramiento y adoctrinamiento político de los españoles, que ya en su himno apuntaba lo siguiente: “Prietas las filas, recias, marciales, nuestras escuadras van cara al mañana que nos promete Patria, Justicia y Pan”.
Prietas las filas y pan para los que apoyen a Sánchez
Prietas las filas y pan solo para los que apoyen al presidente Sánchez. La carta del otro día por supuesto que fue un punto y aparte en la Historia de España. Si tras la guerra civil solo cupo la Dictadura y ésta -y no otra cosa- alumbró la Democracia, los partidos políticos que nacieron de la misma -y no los militares- han querido siempre regresar a ese mundo idílico de tráfico de influencias e irresponsabilidad que hace las delicias de los imperantes y su séquito.
Así, los recientes escándalos, las presiones tanto internas como de los asociados tribales y las diligencias abiertas a Begoña Gómez por sus gestiones a lo Urdangarin multiplicadas por mil –la que no sabía nada y puso escuela, como el Maestro Ciruela- han provocado esa carta con la que ponen punto y final a tanta mariconada y a partir de ahora o se está con el «puto amo« (Puente dixit) o no sales en la foto. Y punto. Desde luego, respiran democracia por cada poro.
La Ley y la Constitución son solo obstáculos para un poder político que ya no está dispuesto a verse limitado por nada. Sánchez quiere ejercer de dictador y lo entiendo, pero no lo compro. La dictadura no se anuncia pero Sánchez te va dejando miguitas como estas: «Propondremos medidas y acciones para prestigiar nuestra democracia«. «Creo en la separación de poderes y la Justicia y creo que es el momento de fortalecerlo«. «Tenemos que ser conscientes del desafío que implica el uso espúreo de las redes sociales, también de estas páginas web que están financiadas con distinto dinero, tanto de gobiernos autonómicos como de gobiernos municipales del PP con la ultraderecha, por determinadas empresas… y ser conscientes del desafío que tenemos de profundización de la democracia«. «Yo defiendo la libertad de prensa, pero lo que es inadmisible es defender todo este fango, todos estos bulos, toda esta desinformación«.
Todo esto ya estaba aquí, en IT MAGAZINE. Os invito a releer la entrada «Regreso al futuro con Allende» con la que podréis anticipar los futuros movimientos de Sánchez. Y todas las demás. El advenimiento de la dictadura se produce cuando el dinero ya no basta para comprar voluntades. En este contexto, las frases del aspirante a dictador cobran otro significado. Prestigiar la democracia significa que ya nadie se pueda salir de los dictados del poder. Habrá que interpretar por dónde van los tiros o perderéis la cabeza como la pobre Marisú Montero. Fortalecer la separación de poderes y la Justicia es ponerla al servicio directo del poder político. ¿Quedará algún juez en Berlín?
¡Con esta democracia da gusto!
Es algo difícil de asegurar porque estos demócratas quieren instruir las diligencias judiciales en las sucursales del PSOE o de los asociados tribales. Si la Administración hace ya prácticamente lo que le da la gana, no quiero imaginarme como serán las cosas dentro de poco. La libertad de prensa es un coñazo que confunde a la gente y lo mejor será volver al NODO. Demasiada democracia también es malo y Sánchez pretende curarnos de una vez por todas.
Los corresponsables de todo este entuerto, los del PP, empiezan a asustarse. Parece que el PSOE puede romper esos acuerdos secretos que ellos llaman consenso. Lo mismo que hizo Hitler con Stalin. La PPSOE puede ser otro coñazo cuando crees que puedes tomar el poder movilizando a la mayoría Frankenstein y a las hordas de cretinos fabricadas ad hoc en nuestro sistema de enseñanza. Entiendo perfectamente la ambición de tomar el poder y de ejercerlo de modo omnímodo. Donde me pierdo es en el para qué. ¿Para qué quieren más poder del que ya han disfrutado en estos 45 años de falsa democracia? ¿Qué han hecho desde entonces? ¿Dónde nos han conducido?
No lo quieren para nada concreto y ese es el auténtico problema. Ese es el problema de fondo. Estos cretinos de la PPSOE –que tanto da- solo quieren el poder por el poder. No quieren hacer nada. No saben hacer nada. Por eso vivimos una política de poder y no una política de soluciones para la ciudadanía. Y vamos de victoria en victoria… hacia la derrota final. Solo quieren un prietas las filas que demuestre quién manda en cada sitio y quien lo hace sobre todos los demás. Lo mismo que con el General. Espabila porque cada vez queda menos para que te señalen con el dedo tú lugar en la fila que luego no podrás abandonar porque, de aquí en adelante, las filas van a apretarse mucho. ¡Con esta democracia da gusto!
