Como vivimos en una permanente campaña electoral, ha pasado desapercibido el arranque de la campaña paras las elecciones europeas del 9 de junio. El PSOE y su puto amo no dejan de agitar el miedo al fascismo y no van a dejar de hacerlo. Utilizaron a Milei y utilizan y utilizaran el reconocimiento al Estado palestino.
El 9-J no es un plebiscito sobre Sánchez
A Sánchez el pueblo palestino le importa lo mismo que le importamos nosotros, los españoles. Entre nada y cero. Lo que le importa es permanecer en el poder, y cualquiera de sus pasos está destinado a ese objetivo. Cualquiera cosa que hace tiene como objetivo seguir en La Moncloa.
El 9-J no es un plebiscito sobre Sánchez. Nos jugamos mucho el 9-J, porque buena parte de nuestro futuro depende de Bruselas y Estrasburgo. Por eso les aconsejo que estudien bien los programas de cada partido, las políticas que han llevado a cabo hasta ahora en Europa, quienes son sus socios.
El de la epístola a los tuiteros no ha dado aún ninguna explicación sobre los negocios de su señora y sobre el fraude de su hermano. Lo último que sabemos de David Sánchez Pérez Castejón, alias “David Azagra”, es que reside en Elvas (Portugal) y dice teletrabajar para la Diputación de Badajoz, aunque no consta que la Diputación le haya autorizado a teletrabajar y ahí está su despacho, vacío, esperándole. David Sánchez tributa al fisco en Portugal, pero cotiza a la seguridad social a través de la Diputación, para poder cobrar una pensión. Y con un salario de 55.000 euros tiene un patrimonio de 1,3 millones de euros, que incluye casas en Elvas, Madrid y San Petersburgo. Un artista el hermano del puto amo.
Ellos siguen a lo suyo…que no es lo nuestro
El Partido Popular centra su campaña en la amnistía que se aprobará el jueves y sigue convocando manifestaciones. Podemos parece que va a desaparecer del mapa, siendo Irene Montero la cabeza de lista. Igual no le queda más remedio que trabar en la taberna de su marido. Y las encuestas le dan entre 1 y 2 eurodiputados a “Se acabó la fiesta”, del analista y activista Alvise Pérez. Yo insisto en que vamos a elegir a unos eurodiputados que sí, se van a levantar algo más de 10.000 euros al mes, pero sobre todo, deben representarnos en un una Unión Europea que resuelve buena parte de las cuestiones políticas esenciales para nuestro futuro.
Aunque la campaña gire en torno a las batallitas del día a día de la miserable política española, nos jugamos mucho y merece la pena pensar muy bien a quien se vota. Ellos siguen a lo suyo, que no es lo nuestro. Puede que el electorado de izquierdas se haya movilizado con los disparates del puto amo. Y parece que el PP sigue el camino de Rajoy de no hacer nada y esperar que el adversario pierda.
Las campañas electorales siguen sin interesar al personal, que está bastante harto de todos, y solo movilizan a los muy cafeteros que asisten a unos mítines dirigidos a los convencidos. Ninguno habla a fondo de su programa, de las políticas que van a defender en Europa. De hecho, hablan poco de Europa. Y así nos va.