La mayoría progresista volvió a pasarse por el arco del triunfo la legalidad, y decidió que el Congreso de los Diputados pase a denominarse Congreso. Así, a secas. Lo hizo a través de una reforma del Reglamento del Congreso de los Diputados.
La progresía española detesta el masculino genérico y tiene un problema incurable con la legalidad. Es ilegal lo que han hecho porque es la Constitución Española la que fija el nombre del Congreso de los Diputados en su artículo 66. No es suficiente un cambio del Reglamento. Tendrían que hacer una reforma de la Constitución y no pueden hacerla porque para ello necesitarían 210 escaños, con los que no cuentan.
Podrían cortarles los huevos a los leones de Ponzano de la puerta principal para que parezcan leonas
Como en la fachada del edificio está esculpido el nombre de la institución, CONGRESO DE LOS DIPUTADOS, así, en mayúsculas, me pregunto si el siguiente paso será picarlo y dejar sólo Congreso. Si lo hacen tendrá una ventaja añadida: podrán utilizar la sede para alquilarla o cederla para otras actividades, tipo Congreso de putas, Congreso de variedades corruptoras, Congreso de propietarios de saunas y prostíbulos, Congreso de sobrinas, Congreso de especialistas en el estudio del ornitorrinco, y cosas así.
Le sugiero a la mayoría progresista que les corten los huevos a los leones de Ponzano de la puerta principal, para que parezcan leonas. O, ya puestos, que quiten los leones y los sustituyan por sendas esculturas de Koldo y Ábalos, pero sin cortarles los huevos, en plan machote esperando a Carlota que se enrolla que te cagas.
Ojo no le encarguen la nueva papelería a alguna imprenta de amigos o familiares a cambio de una mordida progresista
Han avisado de que por ahora el cambio solo afectará a cuestiones administrativas, como referirse al “Congreso” en las tramitaciones y los quehaceres diarios. Me dicen, aunque no he podido ratificarlo, que quizá se cambie toda la papelería oficial. En caso de confirmarse habrá que vigilar la cosa porque me parece probable que le encarguen los papeles a alguna imprenta de algún amigo o familiar. Por supuesto a cambio de la habitual mordida, progresista por supuesto.
El ministro múltiple Félix Bolaños dijo que el nombre de “Congreso de los Diputados” resulta ofensivo para la mitad de la población. No sé con qué población se relaciona la mayoría progresista, porque jamás en 66 años de vida he escuchado a una mujer sentirse ofendida por el nombre de “Congreso de los Diputados”. Si he escuchado a muchas sentirse ofendidas por las actuaciones de este Gobierno en apoyo de violadores y pornógrafos infantiles.
Dice Ábalos que entre Javier Hidalgo y Begoña Gómez “había un conocimiento personal”. Toma Sánchez
Y ADEMAS
- Un grupo de los habituales abajofirmantes progresistas ha difundido un manifiesto en el que hablan de una conspiración fascista contra Sánchez y sostienen que no es legítimo reclamar un adelanto electoral porque entonces gobernaría la derecha. O sea, que estos progresistas que se supone que son gente con estudios y demócratas de toda la vida defienden que estamos condenados a que gobiernen la izquierda y la extrema izquierda toda la vida. Ole sus huevos. Los abajofirmantes se dividen en dos: los sicarios cegados por la fe ciega y los beneficiarios del Gobierno de la “mayoría progresista”. Alguien debería explicarles lo que es una democracia. La noticia es que Sabina, Bosé y Sacristán no firman este manifiesto por la dictadura. Por supuesto no falta Rosa Villacastín, esa mujer. Por cierto, habiendo escritores entre los abajofirmantes, incluso el capo del Instituto Cervantes, convendría que antes de firmar leyeran la cosa, porque la redacción, al margen del contenido, es infecta. Dado que alguno de los firmantes en su día compuso históricas loas a Franco les ha quedado un texto homenaje a la dictadura muy apañado.
- Ojo a la entrevista que le hace a Ábalos en El Confidencial José María Olmo. El señor Ábalos dispara con fuego. Hay que leer y sobreleer. Cuando le preguntan si cuando comenzó a negociar el rescate de Air Europa sabía que la aerolínea de los Hidalgo patrocinaba a Begoña Gómez y qué sabía de la relación de la amada del presidente con Javier Hidalgo, el hijo, el guapo de la melena, responde Ábalos: “Sabía que entre ellos había un conocimiento personal”. Toma Pedro Sánchez. Hila fino Ábalos.
