¿Hay una secta terrorista operativa en España? En anteriores artículos de It-Magazine se ha mencionado innumerables veces el caso de las niñas amparadas por el Instituto Mallorquí de Asuntos Sociales y prostituidas bajo su tutela. La historia se repite una y otra vez. Ya sea en Baleares, Madrid, País Vasco, Asturias, Cataluña, Canarias… siempre con el mismo modus operandi. Menores vulnerables arrebatados a sus familias, la gran mayoría con excusas muy peregrinas, que se ven arrastrados a un centro donde la protección brilla por su ausencia.
Se cuentan por cientos los niños y niñas que se escapan de estos centros donde no se ocupan de ellos. Salen a la calle y se echan en los brazos del adulto proxeneta y traficante de drogas. Y cuando se evaden de los centros, nadie sale en su busca. Los responsables tutores de sus vidas hasta la mayoría de edad, miran hacia otro lado. Se dicen a sí mismos: “Ya volverán cuando tengan hambre”. Y esas criaturas no vuelven porque están de caballo hasta arriba, o de cocaína y son sodomizados y violados por un poco de dinero.
La preocupación de las familias
Son las propias familias de esos menores las que dan el grito de alarma. Incluso algunas salen a buscarlos por sus propios medios y los encuentran en situaciones verdaderamente espantosas. Sus cuerpecitos magullados y derrotados tirados en un barracón prácticamente derruido o en un polígono industrial abandonado. Esa es la protección que aseguran los centros de menores. Las administraciones estatales y autonómicas siguen cobrando por ese menor que ya no está. Y es mucho dinero el que se embolsan.
Cuando pasan los días o semanas y el niño sigue sin aparecer, llaman a la policía. Así es como pasa a engrosar la estadística anual del Ministerio de Interior. En el año 2020 la cifra de desaparecidos alcanzó la cifra de 219.425 de los cuales el 67% corresponden a jóvenes de entre 13 y 17 años. Las provincias con mayor número de casos de personas desaparecidas fueron Las Palmas, Madrid y Barcelona. En años posteriores la cifra bajó bastante siendo en 2022 de 26.000 denuncias por desaparición pero siempre con un alto porcentaje de menores. Las comunidades que presentan un número mayor son Canarias, Madrid, Cataluña, Andalucía y Comunidad Valenciana, Solo en Las Palmas el 91% de denuncias interpuestas corresponden a menores de edad.
Desapariciones en Valencia
Pero quizás el caso que más llama la atención es el de Valencia. Actualmente hay activas unas 30 denuncias por desapariciones y todas en la misma zona de la provincia. Ya en enero de 1989 tres jóvenes desaparecieron en Macastre: dos chicas y un chico. El fue hallado meses después con un disparo en la cabeza. Los restos de las dos muchachas aparecieron un año después. En el intervalo entre 1985 y 1995 y concretamente en esa zona valenciana de Macastre, Catadau, Tous, Chiva, Lliria… 23 jóvenes desaparecieron. Se encontraron 18 cadáveres.
Solo en la Comunidad Valenciana y en el año 2023, el número de menores desaparecidos ascendía a 900 niños. Son terribles estas estadísticas y más terrible aún es que un grupo terrorista y pedófilo ha hecho su aparición en esta provincia. El pasado mes de febrero se produjo una alerta de atentado. Un joven de 23 años fue detenido por amenazar con matar a un número máximo de personas. Se recibieron correos electrónicos en los colegios de Yátova, Chiva, Buñol y Siete Aguas. Estos tuvieron que desalojar, anular las clases y cerrar. Este joven dice pertenecer al grupo 764, una red cuyas actividades principales son la explotación sexual infantil, el secuestro y el asesinato.