La subasta del piso de Kote Cabezudo, embargado desde hace años para cubrir la responsabilidad civil de sus delitos, parece inminente. Aunque muy lentamente, la Letrada de la Administración de Justicia responsable de la ejecución de su condena va completando todos los pasos necesarios. Si todo va bien, 2025 debería ser el año en que las víctimas de Kote Cabezudo obtengan definitivamente su reparación. Personalmente apuesto por los meses de mayo o junio… El tiempo dirá.
Ya hay tasación judicial a los efectos de fijar precio de salida en primera subasta: 736.000 euros. Un verdadero chollo si alguien se lo adjudicara por dicho importe ya que el inmueble a subastar tiene una valoración de mercado bastante superior al millón de euros. Ya se ha obtenido el permiso para que pueda visitar el inmueble todo aquel interesado en la subasta. Y como letrado de las víctimas he sido habilitado por el Tribunal para pujar en el nombre de ellas. Todo esta listo para que se produzca el anuncio público.
La subasta como oportunidad para un sueño
Con las resoluciones judiciales que acercaban el momento de la subasta, una idea empezó a abrirse paso en algunas de las víctimas de Kote Cabezudo. ¿Y si organizamos algo así como un crowfunding para comprar el piso en la subasta y que se convierta en sede de la Asociación Justicia Poética? Lo cierto es que la idea resulta maravillosamente seductora. Que miles de personas aportaran su granito de arena para convertir la casa de los horrores, donde Cabezudo cometió tantas de sus fechorías, en un cuartel general de la lucha contra el abuso sexual, la pornografía infantil y la defensa de las mujeres y la infancia, sería pura y genuina Justicia Poética.
Es un sueño de muy difícil realización por muchas circunstancias. Demasiados factores, todos ellos muy complejos, que tendrían que alinearse para que pudiera darse. Un imposible. Pero también es cierto que en su día soñar con Kote Cabezudo en prisión, en aquellos tiempos de la Instrucción de Ana Isabel Pérez Asenjo, parecía igual de imposible. Tan imposible como era imaginar la historia del Caso Kote Cabezudo convertida en una serie documental en NetFlix. Y es que mira que nos gusta soñar a lo grande…
