La pasada semana a días del inicio del juicio principal contra Kote Cabezudo, he podido comprobar como Odón Elorza sigue disfrutando de la protección mediática en San Sebastián. Se celebraba el juicio por la demanda civil de Elorza contra Mario Díez, abogado de las víctimas de Cabezudo. Allí estábamos en el pasillo esperando a declarar los testigos y llegó Odón Elorza con un buen séquito de amigos. Una víctima de Cabezudo trató de entrar en la sala pero la secretaria judicial le informó de que por protocolo COVID estaba restringida la entrada. Varios periodistas pretendían acceder también. Finalmente solo pudo entrar el periodista de la agencia Efe. La vista oral fue intensa. En la Sala cinco testigos bajo juramento y con obligación de decir verdad, relataron hechos gravísimos respecto a la actuación de Elorza.
Relataron como el entonces alcalde de San Sebastián hoy, aún diputado del PSOE en el Congreso, asistía a fiestas de alto voltaje sexual con menores. Cómo su chofer renunció a su trabajo harto de tener que llevarle a esas fiestas. Y cómo era conocido en la ciudad como “el follaniños”.
Odón protegido una vez más con una información sesgada
Bien, pues la noticia distribuida por la agencia Efe se limitó a contar lo que declaró Odón Elorza. Lo que declaró Mario Díez y como la fiscal, que no hizo una sola pregunta, pidió que condenaran al abogado de las víctimas de Cabezudo. Pero deliberadamente pese a ser el único periodista en la sala, empleado de una agencia pública, omitió palabra alguna de los testigos y no informó de que la Fiscalía envió a una fiscal que no había intervenido en la instrucción durante la que un colega suyo se había mostrado partidario de no condenar a Mario Diez.
O bien al redactor le obligaron a omitir las testificales o lo decidió él personalmente. Es igual. El resultado es que le hurtaron a los ciudadanos la verdad de lo sucedido, proporcionando una información sesgada para proteger a Odón Elorza una vez más en San Sebastián. El periodista no es dueño de una noticia. La información pertenece a los ciudadanos.
El redactor de Efe impidió que los ciudadanos supieran la verdad de lo sucedido en el juicio. Ocultó una parte esencial del mismo, al servicio de quien fue descrito en la testifical como “el señor X de la mafia de San Sebastián”. Un comportamiento indigno e impropio de un profesional. Más aún si cobra su sueldo de dinero público y más aún sabiendo que era el único periodista al que se le permitió acceder a la Sala. Como les digo siempre: la penúltima en el Caso Kote Cabezudo, donde siempre nos queda otra más grave que ver.
Aquí estamos y estaremos nosotros para jamás ocultarles nada. Hoy ha empezado el juicio principal contra Kote Cabezudo. Nosotros estaremos y les contaremos todo lo que suceda en la Sala. No lo duden.
Y además…
Proliferan en las televisiones los “ucraniologos”, opinólogos de lo que sea menester. Miguel Angel Revilla, el presidente cántabro, hace dos semanas afirmó ufano en La Sexta noche: “No. No va a haber ninguna guerra allí”. Pero el gran fenómeno televisivo de España desde el inicio de la pandemia es el doctor Carballo, jefe de Urgencias del Ramón y Cajal de Madrid. Ha sido el gran oráculo del coronavirus. De protagonista permanente de La Sexta de Ferreras y Pastor, ha dado el salto ya a Cuatro, Telecinco y Antena 3. Además del COVID se convirtió en experto en volcanes cuando lo de La Palma. Pero la que faltaba es que el doctor Carballo se haya convertido también en experto en Ucrania. Y ha tenido los bemoles de decir que “siempre que haya una catástrofe habrá un urgenciólogo”.
Y en su Twitter escribió: “¿Como puede influir el COVID en la guerra Rusia-Ucrania? HILO”. En su opinión Ucrania ganaba la batalla antes de comenzar por sus altos índices de vacunación. “Si capturo tropas enemigas he de asegurarme de que no están infectadas con un patógeno respiratorio que pueda afectar a mis tropas”. Y claro, la banda de Twitter empezó el cachondeo: “Oye César, sabes si el Ejército ruso puede pasar la frontera a Ucrania sin pasaporte COVID? ¿En un combate cuerpo a cuerpo debería utilizarse mascarilla? ¿Hay que llevar FPP2 en el interior de un tanque si se respeta la distancia de seguridad?
Basta ya de ucraniologos y esperemos que el doctor Carballo regrese pronto a sus urgencias, donde seguro le necesitan más que dando opinión sobre lo que se tercie.
Cunde sin parar lo de hablar de Vox como la extrema derecha o la ultraderecha. Si nos seguimos rigiendo por el bipartidismo y el PSOE es de centro izquierda y el PP se reclama de centro derecha, ¿quién es entonces la derecha en España? Y ¿quién sería la izquierda o la extrema izquierda? Aquí a todo el que no piensa como uno, se le tilda rápidamente de ultraderecha, de facha. Especialmente desde la extrema izquierda, la izquierda y el centro izquierda. Qué hartura.
