Como era previsible, el estreno en Netflix de la serie documental sobre el Caso Kote Cabezudo, “En el nombre de ellas” (no dejen de verla), ha removido conciencias. También nos ha permitido acceder a más testimonios reveladores de lo que sucedía en el estudio que Cabezudo tenía en la calle Palacio así como en su casa de la calle Urbieta de San Sebastián.
IT MAGAZINE ha podido acceder al testimonio de dos mujeres que posaron para Cabezudo. Las dos afirman que, en una ocasión cada una de ellas, en la sesión irrumpió “a mirar” el cocinero donostiarra Juan María Arzak. Ambas coinciden en que “el cocinero no nos hizo nada, se limitaba a mirar”.
Estos dos testimonios confirman las sospechas que ya teníamos de la presencia de otras personas en el estudio de Cabezudo a partir de las declaraciones de la testigo protegida 2 bis en el sumario. Esta testigo declaró en sede judicial que en una sesión entró en el estudio un hombre mayor que también abusó de ella. En idéntico sentido se pronunció el testigo Antxon Massé, que renunciando a su condición de testigo protegido, ratificó y amplió en sede judicial lo que escribió en su blog el 17 de enero de 2017, en un artículo titulado “El coño de la Bernarda”: “la entrada y registro que se realizó en los archivos y ordenadores del fotógrafo amigo de tantos amigos y amigas que ahora reniegan del que hasta hace poco compartía pupitres y pajas con ellos. Y en todo caso, ¿Quién puede reconocer el coño de la Bernarda entre tantos?”.
Antxón Massé dijo además ante el juez que un amigo, José Luis “Pepelu” Yarza Amondiarain (marido de Yolanda Domeño Nieto, magistrada y ex presidenta de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de San Sebastián) «me contó que él mismo había asistido al estudio de Kote y le había visto tener relaciones sexuales con las chicas que iban a posar. Que Kote le había dejado tener relaciones con las chicas, me lo dijo antes de fallecer mi amigo José Luis Yarza Amondiarain. Me dijo que él iba y se escondía, creo que tras un biombo. Veía que Kote les metía los dedos, les metía la puntita, y que luego participó él mismo y entonces ya capitán general”.
Arzak, y el entorno de poder de Cabezudo
El primer testimonio relativo a Juan Mari Arzak del que disponemos en IT MAGAZINE es el de una chica que se dedicaba a los contenidos eróticos y que posó varias veces para Cabezudo. Nos dice: “ Fue Kote Cabezudo quien contactó conmigo. Aunque tengo algunos recuerdos bloqueados, ver el documental me ha hecho revivir y algunas cosas siguen muy vivas en mí. Me contactó y me propuso hacer una sesión.
Yo la primera vez que trabajo con un profesional jamás voy sola. Fui con el que entonces, era en 2008, mi pareja. Hicimos una sesión de fotos muy explícitas. Fue una sesión de seis o siete horas. Todo fue normal. Al cabo de uno o dos meses me contactó para hacer otras sesiones. Me dijo que podía ir sola. Yo no vivo en San Sebastián, y me ofreció quedarme a dormir en su casa, que tenía habitaciones, por si llegaba cansada para hacer las fotos al día siguiente.
El siempre ofrecía a las que éramos de fuera esa posibilidad porque solo pagaba las sesiones y los billetes de autobús. En la segunda sesión recuerdo que él estaba todo el rato en erección y aunque en este sector ves cosas que en otros no son normales, no me había pasado nunca con ningún otro fotógrafo profesional. Me hizo sentir muy incómoda. Y entonces me dijo que tenía un aceite especial que hacía que la textura de la piel estuviera muy distinta, que era una maravilla y que me lo pusiera.
Lo hice y me dijo que no lo había hecho bien que me lo iba a poner él, y entonces me tocó el pecho. Yo me quedé parada y la persona que me acompañaba dijo, hasta aquí ¡¡ehhh!! Yo estaba perpleja. Luego hubo otra sesión a la que fui acompañada también. No sé si por mi entonces pareja o por una amiga y de pronto alguien picó la puerta y apareció ahí otra persona, como si hubieran quedado. Le dijo mira aquí estoy trabajando con la modelo, quédate. Era el cocinero Juan María Arzak, que se quedó ahí mirando con detalle toda la sesión.
De repente Kote insistía en hacer como una serie de videos cortos para usarlos como trailer. Me mosqueé porque no habíamos acordado ningún video, ni por contrato ni nada, y resultó que todo el tiempo estuvo grabando. El no me había avisado de que iba a entrar nadie, pero luego lo comenté con una amiga y me contó que le había pasado lo mismo, que había aparecido el cocinero. Cuando en mi sesión apareció Arzak, Kote hacía fotos como presumiendo de las chicas que tenía. Ese día había también otra chica en la sesión e hicimos fotos bastante íntimas. Había otra chica ahí, voluminosa, que estaba como para echarle una mano, que decía que era maquilladora y que después se fue.
Kote de mí no abusó sexualmente, lo que si hacía era que aprovechaba y se movía mucho y pasaba por detrás rozándose. Te rozaba para colocarte algo y Arzak le comentaba jo, es que no veas que suerte de trabajo eh, que maravilla, y hablaban entre ellos de sus cosas, de eventos que tenían. Después de esa sesión hice bastantes más con él, me pedía que trajera chicas y le llevé varias. Arzak no me tocó, se limitaba a mirar y comentar con Kote. Pero en el resto de las sesiones no volvió a aparecer Arzak. A mi Kote me generaba desconfianza y a las chicas que le llevé les dije que ninguna fuera sola. Nunca más apareció Arzak, ni ningún otro amigo”.
Esta mujer aporta otro dato relevante para el Caso Cabezudo: “Recuerdo que Kote estaba obsesionado con las senegalesas, que tenía una piel muy especial y que claro, que como en España los padres estaban muy encima de las chicas para controlar las fotos que se hacían, y que en Senegal no era así… Me da pavor pensar lo que ha podido hacer Kote en Senegal, fuera de España”.
El cocinero, gran amigo de Iñigo Olasagasti (First Models) e Ignacio Muñoz (Radio San Sebastián)
El segundo testimonio al que ha accedido IT MAGAZINE es el de una de las amigas de esta primera que acudió al estudio de Kote Cabezudo en la calle Urbieta, donde tenía también su vivienda: “Era el año 2008. Yo no soy de San Sebastián, me ofreció dormir en su casa y acepté. Hicimos la sesión al día siguiente después de comer. La primera sesión todo fue normal. La segunda sesión ya empezó con lo del aceite, que me lo había puesto mal. Me lo puso él en el pecho y en el culo. Estuvo toda la sesión en erección. A mi me pareció muy desagradable y muy poco profesional.
La tercera sesión fui con otra chica y cuando estábamos en plena sesión nos dijo que iba a venir un amigo suyo, el cocinero, que acudía habitualmente a las sesiones a mirar, que al cocinero le gustaba mirar. Hablaron por teléfono y al rato apareció. Nos lo presentó diciendo que era su amigo el cocinero, y el cocinero se colocó allí a mirar. No nos hablaba. Estuvo un rato mirando y se fue. Nosotras cuando nos dijo que iba a venir el cocinero no nos negamos, lo permitimos, porque estábamos ahí impresionadas, te quedas un poco bloqueada. Pero fue una sesión muy desagradable y poco profesional, con el cocinero ahí mirando. Y pese a que Kote me lo pidió muchas veces, no volví a posar para él”.
“Me insistió mucho para que volviera a hacer más sesiones. Me ofreció 200 euros por ir a hacer un video de masaje para spa, pero no acepté, le dije que no. No me ofrecía la más mínima confianza. Esta es mi experiencia con Kote. De mí no abusó porque además yo tengo mucho carácter y le paré los pies cuando ví que estaba empalmado y vi su actitud. Supongo que se dio cuenta de que si intentaba algo conmigo iba a tener un problema. El cocinero se limitó a mirar, tampoco intentó nada, solo miraba”. Esta mujer coincide también en destacar que “me contaba que le gustaban mucho las chicas senegalesas, que tenían una piel muy tersa, y que viajaba dos o tres veces al año a Senegal con un amigo. No quiero imaginar lo que ha podido hacer en Senegal”.
Juan María Arzak, además de la relación que tenía con Kote Cabezudo, era “gran amigo” de Iñigo Olasagasti. Fundador y director de la agencia First Models, de la que era fotógrafo oficial Kote Cabezudo, como se acredita en la imagen que reproducimos de la cuenta de Instagram de First Models en la que se ve a Olasagasti con Arzak y con el periodista Ignacio Muñoz, ya fallecido, de Radio San Sebastián Cadena SER junto a cuatro modelos de la agencia. Conviene no olvidar tampoco que Ignacio Muñoz fue también señalado por el testigo protegido 3 bis como alguien que favorecía las actividades de Kote Cabezudo.
Además, había una buena relación de Arzak y de Cabezudo con Odón Elorza, ex-alcalde de San Sebastián. Elorza que fue señalado por el testigo protegido 3 bis como clave en la estructura de financiación y protección de que dispuso durante años Kote Cabezudo. También reproducimos un intercambio de mensajes en Facebook entre Elorza y Cabezudo en los que el ex-alcalde dice tener “en exclusiva la receta sagrada y secreta de Juan Mari Arzak para el tinto de verano”, a lo que Kote le responde a Elorza “perfecto para este verano”.
Como les hemos dicho muchas veces, el Caso Kote Cabezudo está comenzando. En IT MAGAZINE vamos a cumplir con nuestra obligación de llegar hasta el final, caiga quien caiga. Sígannos si no quieren perderse nada y desean estar informados verazmente. El resto de los medios, bien regados de dinero público, mucho me temo que seguirán callando. Nosotros seguiremos como siempre fieles a nuestro compromiso de investigar, informarnos, contrastar y publicar le pese a quien le pese, nos cueste lo que nos cueste.
A por ellos. No puede consentirse ésto. Bastante se ha callado en ente caso. Cómo se pueden cerrar los ojos ante ésto?.
Eso no puede quedar impune, ni con una condena ridícula. No sé puede llevar a Europa? Esta banda no puede acabar sus días felices son responder por tanto mal