Como ya comentamos hace unas semanas el 4 de julio de 2024 era la fecha señalada para la celebración del último de los juicios que están pendientes contra Kote Cabezudo. Un juicio que ya había estado señalado con anterioridad el 30 de abril de 2024. En ambos casos el mismo resultado: suspensión del juicio. ¿Los motivos? Para las víctimas ya dan igual.
Puede ser porque no lleven al violador a la Sala a donde van juzgarle o porque el juzgado no notifiquen a los peritos de la Ertzaintza su comparecencia en el Juzgado. Siempre la Justicia se burla de las víctimas de Kote Cabezudo. Se prolonga la terminación del proceso para las víctimas y con ello su agonía. Ya son más de 11 años los que transcurren en este procedimiento y que parece que no termina nunca.
Cabezudo y los incontables errores de los órganos judiciales hacia las víctimas
Ya está señalado nueva fecha para este juicio, el 6 de noviembre de 2024. Desconocemos si será suspendido o por el contrario por fin podrá celebrarse. Con el Juzgado y con Kote Cabezudo es todo una incógnita. Parece que el juzgado quiere seguir mofándose de las víctimas y de otras posibles víctimas que pudieran surgir en nuevos procedimientos. Lo que si está claro es que ante estas suspensiones, el Juzgado podría haber avisado al letrado de las víctimas que sabe que viaja desde Oviedo y no lo ha hecho.
Así que la indiferencia del juzgado es absoluta. Se falta nuevamente el respeto a las víctimas y a su letrado. Una simple llamada hubiera bastado para poner en conocimiento del letrado la suspensión del juicio y así ahorrarle los costes del viaje y no hacerle perder el tiempo. Da igual que el procurador pregunte al juzgado si el juicio se celebrará o no…porque todo parece en orden y el resultado ya lo sabemos todos. Unos costes que las víctimas no podrían asumir y que gracias a la Asociación Justicia Poética y a todos los Poetas Guerreros es posible asumirlos.
Podríamos pensar que existen errores, que todo el mundo se equivoca y que fallos tienen todos los juzgados. Que en los juzgados trabajan personas humanas. Pero estos «errores» de los órganos judiciales ya son muchos. Y han supuesto un quebranto en las víctimas. Son incontables y reiterados. El daño psicológico se agrava a medida que pasa el tiempo y el coste económico también. No solo Cabezudo se ríe de las víctimas sino los órganos judiciales también.
Son abusos incomprensibles que no parecen terminar nunca. Una lista de errores que se ha repetido durante los más de 11 años de procedimiento. Los hechos son claros. Las sentencias los confirman. La última en febrero cuando ha quedado probado como Cabezudo falsificó contratos con menores de edad para tapar la pornografía infantil que producía. Muchas conductas criminales, muchos delitos. Todo probado en sentencias. Esperemos que el próximo día 6 de noviembre pueda celebrarse el juicio y queden probados una vez más los delitos de Cabezudo.
Las víctimas esperan. No les queda otra. El letrado insiste en buscar justicia para las víctimas. Da igual cuantas veces lo suspendan porque el letrado seguirá inquebrantable en su afán de exigir que Cabezudo pague por sus actos. La Asociación seguirá inquebrantable. Al igual que todos los Poetas Guerreros. Cada vez son más los que se unen para exigir justicia. Una justicia que no ayuda, sino que se ríe de las víctimas.
