La liberación de Brittney Griner, estrella del baloncesto femenino en los EEUU de Norteamérica, por Putin evidencia que carece del más mínimo sentido de la Justicia. También que los seres humanos para él son solo piezas que puede utilizar al servicio de sus siniestros intereses. Griner fue detenida en Moscú en febrero por portar unos cartuchos de vaporizador con algo menos de un gramo de aceite de cannabis. Ni siquiera la legislación rusa consideraba delito la cantidad que le pillaron a la pobre Britney, que garantizó utilizarlo como terapia para aplacar dolores.
Pero Putin necesitaba una pieza para canjear con EEUU con el traficante de armas Viktor Bout. Condenado a 25 años por sus negocios con estructuras mafiosas hispanoamericanas, asiáticas y africanas. Un angelito al que llamaban “El mercader de la muerte”. Bout suministraba armas a Charles Taylor en Liberia, a la guerrilla salvaje de Sierra Leona. También a Gadafi y sus secuaces en Libia y a las FARC colombianas. O sea, a lo más granado del crimen internacional.
Esos son los colegas de Putin. Joe Biden decidió acceder al canje sobre la base de que priorizaba conseguir la libertad de una inocente encerrada en una mazmorra en medio de la nada. Consciente de que muchos lo iban a interpretar como una muestra de debilidad frente a Rusa y Putin. En su país acusan a Biden de debilidad y de propiciar que Putin recupere a un acreditado traficante de armas en un momento en el que las necesita en Ucrania a cambio de la libertad de una deportista detenida con una cantidad de cannabis que no supone delito prácticamente en ningún país del planeta.
Brittney: una inocente privada de libertad
Por un lado alegra saber que Brittney ha podido salir de esa mazmorra en la que jamás debió entrar. Por otro, aterra pensar en quién será el siguiente, porque Putin va a seguir utilizando esta estrategia, privar de libertad a un inocente y someterle a todas las sevicias imaginables, porque le quedan aún tipos a los que recuperar. Capturará a hombres o mujeres especialmente débiles y sin responsabilidad alguna en asuntos delictivos, para generar más impacto en la opinión pública y en los gobernantes americanos y occidentales.
Y no nos olvidemos del ex marine Paul Whelan. Ejecutivo de una empresa de seguridad estadounidense, que lleva preso en Rusia desde 2019 acusado de espionaje y por quien Putin pedirá mucho más que por la pobre Brittney. Inicialmente Biden pretendía incluir en el canje a Whelan, pero Putin se puso serio y negó posibilidad alguna de entregar a Whelan en la misma negociación que Griner. El presidente de USA dijo que “no nos olvidamos de Paul, este no ha sido un caso de elegir sobre qué norteamericano traer a casa. Era traer a Griner o nada”.
A Putin le gusta tener rehenes y encontró a Brittney Griner, estrella del baloncesto americano que había fichado por el equipo ruso UMMC Ekaterinburg para aprovechar un parón de la liga profesional femenina en su país. Bout, el mercader de la muerte”, fue detenido en 2011 en Thailandia por la agencia antidroga estadounidense. Y tras dos años y medio de proceso en Thailandia fue extraditado a EE. UU.. La figura de Bout inspiró la famosa película “El señor de la guerra”, protagonizada por el actor Nicolas Cage.
Y además…
- Luis Enrique ya es historia de la Selección Española de Fútbol. Su egocentrismo personal y su inmovilismo táctico le condenaron. Es lo que tiene autoproclamarse mejor entrenador del mundo, exponerse como monologuista a diario y hablar permanentemente de MIS jugadores. MI idea futbolística. MI selección. Hasta el punto de que culminada la eliminación con el fracaso ante Marruecos, y sabedor de que su contrato terminaba en pocos días, tuvo los huevos de decir que se iba a ir a relajar con su familia y sus perros y a pensar que era lo mejor para la Selección Española, como si fuera el dueño, como si dependiera de él. A quien le tocaba tomar la decisión de proponerle renovar o no era a Luis Rubiales. El polémico presidente de la Federación que le nombró, y que afortunadamente tenía claro desde días antes que era insostenible mantener a Luis Enrique en el cargo. El remate fue ver al final del tiempo reglamentario frente a Marruecos como el autoproclamado líder de la Selección dejó que fuera Busquets quien, papelito en mano, distribuyera el orden de lanzamiento y los jugadores que lanzaban, mientras que el líder se repanchingaba en el banquillo y veía los lanzamientos sin moverse en la gran pantalla del estadio. En los penaltis ya no hay posesión. Tiki taka ni tiki nada. Una pena que no lanzara los penaltis Luis Enrique, porque viendo el lenguaje corporal de Sarabia, Soler y Busquets, los tres que lanzaron, los tres que fallaron, mientras se acercaban al punto de lanzamiento era evidente que no estaban preparados para ello. Luis Enrique se pasó por el forro los consejos de sus superiores en la Federación y de los expertos en comunicación. Y se empecinó el comparecer diariamente en Twicth. España no se ha ido del mundial por Twicth. Pero a Luis Enrique y a la Selección no les ha ayudado nada esa comparecencia diaria del seleccionador que no concede entrevistas a profesionales de medios de comunicación y que en las ruedas de prensa es especialista en ponerse farruco y faltar el respeto a la prensa. Tras caer eliminada España, a la primera pregunta que se le formuló respondió: “Ah, si, ¿dices que has visto el partido, verdad? Supongo que lo habrás visto de espaldas”. De espaldas a todos los españoles y al sentido común ha estado Luis Enrique desde hace meses. Ahora España está eliminada y Luis Enrique espera ofertas. Y las tendrá, y buenas. Veremos si regresa al Twitch. El gran líder ha cosechado un fracaso histórico empecinado en un tiki taka estéril en el que cualquier jugador que intentara salirse del guion era reprendido inmediatamente. Pues nada, que el gran líder siga su camino. Seguro que le espera la gloria. No se enteró siquiera de que su contrato no se renovaba hasta que aterrizó en Madrid. Creyó que Rubiales iba a dejar la decisión en su mano, porque el gran líder pensaba que en la Federación también mandaba él. Con lo listo que es el líder. Rubiales se cargó al gran líder y al director deportivo, Francisco Molina. Quizá debiera considerar el presidente si no debiera haberle acompañado hasta la calle.
- No dejo de recibir mensajes preguntándonos cuando estrena Disney la serie documental sobre el Caso Kote Cabezudo. Una brillante y meritoria producción de Sr. Mono cuyo estreno anunció Disney para el 23 de noviembre. Por ahora solo puedo decirles que estamos, como siempre, ante el penúltimo escándalo del caso. Disney ha decidido que no la va a estrenar. Antes de que rueden las cabezas que evidentemente van a rodar en Disney estarán ustedes informados de todos los detalles. En la casa de Mickey Mouse matan despacio. Y son muy modernos y políticamente correctos. Quieren princesitas negras y príncipes gays pero resulta que ahora no quieren princesas abusadas por Kote Cabezudo y protegido por gente muy poderosa. No se les ha movido un músculo del cuerpo para dejar tiradas y apuñalar a las víctimas de Kote Cabezudo, que les traen al pairo. Y como son además muy cobardes no han dado la cara con ellas y no han comunicado que no piensan emitirla, pero ya se lo comunicamos nosotros. A nosotros no nos calla nadie. Y no tengan ustedes dudas de que contaremos con detalle lo sucedido, que es muy grave, con nombres y apellidos. También conocerán los rostros de quienes han hecho esta canallada a estas víctimas en la línea de la juez instructora Pérez Asenjo, del gran protector Odón Elorza, de la magistrada Domeño, la fallecida magistrada Cinto, la saga de los fiscales Zaragoza y compañía. Aquí van a quedar retratados todos. El Caso Kote Cabezudo está empezando. Lo verán y lo leerán. Como podrán ver, no lo duden, la serie documental que Disney quiere que nadie vea. A nosotros ns nos va a callar nadie, de ningún modo. Como Dante a las puertas del infierno, que quienes lo pretenden o quienes en Disney quieren tapar bocas, que pierdan toda esperanza con nosotros. Y adiós, Disney, Mickey Mouse y compañía. Aunque nos vemos muy pronto.