Acudió Abalos lo de Risto. Creyó que jugaba en casa en el programa del que es colaborador, el programa que prohíbe hablar del Caso Kote Cabezudo. Quizá pensó que si protegen a un violador y pornógrafo infantil porque no proteger a un amigo en apuros de corrupción. Pero Risto Mejide no quería quedar mal y le hizo una buena entrevista. No sé si Abalos pretendía, con la escenografía, lanzar algún mensaje. El sentado bajo un letrero que reza “Todo es Mentira”.
Sentido de pertenencia a un partido que podría hundir al señor X
Quizá pensó que se iba a interpretar como que todo el caso es mentira, pero visto lo visto quedó como que todo lo que decía él era lo falso. Dio muchos titulares. Yo me quedo con tres. Primero, cuando tuvo el cuajo de criticar a Koldo por su cutrez y su torpeza. Risto, atinadamente, le hizo ver que lo grave es lo que hicieron. No lo torpes que han sido, pero Abalos insistió en que le parece “torpe”.
Después llegó el momento de las lágrimas, “lo siento por ellos, por los amigos… (los que siente que le han dejado tirados) Risto, el sentido de pertenencia…”. Será el sentido de pertenencia a un partido que ha protagonizado los mayores casos de corrupción, incluso de terrorismo de Estado. El partido que, en la lucha contra el terrorismo etarra optó no ya por el “plata o plomo” sino por el “plata y plomo” porque, además de asesinar, robaron a manos llenas el dinero de los Fondos reservados de Interior.
Cuando comenzamos la investigación de los GAL muchos decían que no iba a llegar a ninguna parte. González apoyó inicialmente al ministro de Interior, José Barrionuevo, que se negó a dimitir. Pero Abalos, con su sentido de pertenencia al PSOE, recordará que finalmente Felipe González, el presidente, terminó acompañando a Barrionuevo a las puertas de la prisión de Guadalajara, junto a buena parte de la banda. Y donde se congregaron miles de socialistas que no se cortaron un pelo en insultarnos y amenazarnos a los periodistas que denunciamos el caso.
Sentido de pertenencia a un partido que centró todos sus esfuerzos en evitar que los GAL. O la corrupción de Filesa, Malesa y Time Export alcanzara al presidente, al vértice de la pirámide. Barrionuevo aceptó el sacrificio y su Koldo era Rafael Vera. No tiene pinta de que Abalos vaya a aceptar seguir el camino de Barrionuevo. El, y Koldo, y los demás, podrían hundir el señor X, que aquí es Pedro Sánchez.
El rescate de Air Europa con créditos y avales
Si tanto sentido de pertenencia tiene, debe conocer el paño Abalos. Puede haberse apretado la soga al decir en lo de Risto que ha borrado sus mensajes de whats con Koldo. Porque tiene toda la pinta de que el juez instructor de la Audiencia Nacional está haciendo acopio de información para, en breve, elevar la causa al Tribunal Supremo para que investigue a los aforados. O sea, a Abalos, Armengol, Marlaska, Illa, Torres, Cerdán etc. Y ojo que Sánchez tiene un punto débil sin aforar. Su mujer, Begoña Gómez Fernández, que es probable que tenga que acudir a declarar para explicar con detalle sus contactos a través de los coleguis de Koldo, con los capos de una aerolínea. Air Europa, en rescate.
Porque Air Europa financió una cátedra en la Complutense a Begoña Gómez. Y se reunió con Victor Aldama, comisionista de la trama Koldo y en nómina de Air Europa, para “hablar de negocios”. Ojo a la responsabilidad del propio Sánchez, porque el Consejo de Ministros acordó el rescate de Air Europa con créditos y avales por más de 1.100 millones, en una sesión presidida por Sánchez. No consta que se abstuviera como le obliga la ley que regula los conflictos de interés para altos cargos.
En Presidencia del Gobierno confían en que la lentitud de la justicia juegue a su favor. Quizá se equivoquen. De entrada, a ver cómo sortean, aplicando el trato suministrado a Abalos, no obligar a dimitir a la presidenta del Congreso, cercada en el sumario. Puede que Alfonso Rodríguez Gómez de Celis esté ya calentando en la banda. Y la ministra Montero, Chiqui, que formó parte de la Junta de Andalucía cuando el latrocinio de los ERE, que salió rauda a decirle a Abalos en público “yo sé lo que yo haría, se lo que yo haría”. Y a quien Abalos ya ha advertido diciendo que ella tiene en la espalda cosas peores que él. Un aviso a navegantes con sentido de pertenencia a un PSOE que es un museo de la corrupción.
Abalos fue arrojado a los leones por Sánchez sin que un juez le haya llamado. Armengol y los demás están obligados a hacer lo mismo una vez levantado el secreto de sumario y conocidos los indicios sobre ellos. Sobre todo Armengol, tercera autoridad del Estado, que parece dispuesta a parapetarse hasta el final.
Lo tiene crudo Sánchez: se queda sin apoyos
El caso Koldo no es el Caso Roldán, que era un hombre que decidió robar por sí mismo, el solo. Este caso afecta a las personas de más confianza de Sánchez, incluso a su esposa. A Sánchez le empiezan a fallar los apoyos en el partido y fuera del partido. Donde sus socios se preparan para subir el precio de sus votos.
Lo tiene crudo Sánchez. En cuanto la Audiencia Nacional le dé el pase del sumario al Supremo y empiecen los suplicatorios la cosa se va a calentar demasiado. Porque varios de los implicados no están dispuestos a sacrificarse por el amado líder al que han servido durante años como sumisos esclavos. No están dispuestos a entrar en el saladero de Alcalá Meco o Soto del Real. Ya se lo dijo Abalos a Santos Cerdán. Como le advirtió que entendería que Koldo tenga que ingresar, “pero no penséis que Koldo va a aceptar un Amedo, siete años encerrado con promesas que no se cumplen”.
Y a ver el PNV, que se pone siempre estupendo en estos casos. Recuerden como apoyó a Sánchez en la moción de censura que le hizo presidente, por un párrafo del juez de Prada en una sentencia de la Gürtel, metido con calzador, que después fue anulado por el Supremo.
Una moción de censura defendida también por Abalos con el argumento de que el PP no podía seguir gobernando por un caso de corrupción de mucho menos empaque que este entramado que empieza en Koldo y termina en Sánchez, pasando por la presidenta del Congreso, el número 2 del PSOE y cuatro ministros. Ay el sentido de pertenencia, amarrados a un poder del que no quieren salir de ningún modo. Y se apoyan los unos a los otros sin pudor ni vergüenza. Y la peña les sigue votando.
