Para orientarnos, para calcular distancias, para conocer de antemano las diferentes alternativas en un viaje… Google Maps se ha convertido hoy en una herramienta indispensable para millones de usuarios en todo el mundo. No sólo por su precisión a la hora de indicar cómo ir de un sitio a otro, sino también por sus minuciosas y detalladas vistas de calles, paisajes y edificios.
La cámaras de Google Maps actúan como un chivato
Y aunque Google al parecer no sigue una periodicidad fija a la hora de actualizar las imágenes que va añadiendo en Google Maps y a otras aplicaciones como Google Street View, sí es frecuente encontrarse con que la calle que hace unos días estaba en obras, ahora en Google sigue apareciendo con las mismas vallas y la misma señalización de que la zona se encuentra en reparación.
En otras ocasiones, la actualización es más inmediata de lo que se espera y las cámaras de Google Maps son capaces de registrar lo más actual. Eso mismo es lo que ha ocurrido en un remoto pueblo de Soria. Las cámaras de Google Maps han actuado con un auténtico chivato. Y han recogido el momento preciso en el que uno de los posibles asesinos de un hombre en Soria, escondía el cuerpo en el maletero de su vehículo.
La Policía se encuentra en estos momentos investigando las imágenes. Pero todo apunta a que el cuerpo de Luis P.O., de 32 años, desaparecido en Soria hace algo más de un año, puede ser quien se percibe envuelto en un saco blanco en las imágenes ofrecidas por Google Street View. La Policía Nacional cree que podría tratarse del cuerpo descuartizado del desaparecido. Y el hombre que lo esconde, según ha confirmado la Subdelegación del Gobierno en Soria, es uno de los dos detenidos por la Policía Nacional el pasado 12 de noviembre. La otra persona detenida es una mujer, su exmujer, y el desaparecido y la víctima, la persona con la que al parecer, la mujer pudo tener una relación sentimental.
Medios nacionales e internacionales se hacen eco del suceso de las cámaras
Hace unas semanas la Policía encontró el torso de un hombre en avanzado estado de descomposición en un remoto pueblo de Soria, Tajueco, donde residen nada menos que 56 personas. El cadáver se encontraba oculto en el cementerio de la aldea. Las autoridades pronto se pusieron a investigar, aunque en realidad llevaban ya tiempo detrás de la investigación, desde que un familiar denunció la desaparición de Luis P.O., cubano residente en Zaragoza. Llevaba sin saber de él mucho tiempo. Y las piezas del puzzle parecían empezar a encajar.
Antes de desaparecer, la víctima contó a su familiar que había conocido a una mujer y pretendía mudarse con ella a Soria. Mujer conoce a hombre, hombre se traslada al lugar acordado con la mujer, donde descubre que ha estado casada con un vecino de la aldea. Discuten y los dos presuntos deciden acabar con la vida del hombre.
Todavía no se sabe con exactitud qué es lo que pudo ocurrir. Y a día de hoy el caso está bajo secreto de sumario. Pero la policía sigue trabajando para tratar de desvelar qué le ocurrió a Luis, si realmente todo responde a un macabro triángulo amoroso. Pero medios nacionales e internacionales ya se han hecho eco del suceso, no por el argumento sino por la curiosa casualidad de que en un remoto lugar de la de la comarca Berlanga de Duero, en esa zona que llamamos “España vaciada”, las cámaras de Google Street View hayan recogido el preciso momento en el que un presunto asesino esconde parte de las pruebas que pueden llevarle a prisión por homicidio.
