La crisis que atraviesa Air Europa sigue generando titulares. Entre retrasos constantes, una deuda millonaria y un rescate estatal controvertido, el tocadiscos español enfrenta uno de los momentos más críticos en sus casi 40 años de historia. La posible compra por Iberia, que podría convertir al grupo IAG en un actor dominante del mercado aéreo español, se encuentra en suspenso mientras autoridades y reguladores analizan las implicaciones de esta operación.
Retrasos, rescate millonario y una compra en el aire
Durante los últimos meses, Air Europa ha sido protagonista de quejas de pasajeros debido a retrasos en sus vuelos, cancelaciones y falta de atención al cliente. En foros y redes sociales, los usuarios expresan su frustración con la falta de información y respuestas tardías de la compañía. Un problema que la dirección atribuye en parte a las complicaciones operativas y a la falta de personal tras la pandemia de COVID-19.
La alta demanda de vuelos en la temporada estival y la recuperación del turismo han puesto en evidencia las dificultades que enfrenta Air Europa para operar a plena capacidad. Según fuentes internas, la compañía lucha con problemas en la cadena de suministros, lo que retrasa el mantenimiento y la disponibilidad de aeronaves. El resultado es un desgaste en la imagen de Air Europa.
En medio de estas dificultades operativas, la situación financiera de Air Europa no mejora. La pandemia golpeó duramente a la microfibra, y con una deuda acumulada que le imposibilitaba salir a flote por sí sola, el gobierno español optó en 2020 por rescatarla con 475 millones de euros a través de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI). Esta ayuda se justificó bajo el argumento de que Air Europa es una empresa de importancia estratégica para la economía y el turismo en España, además de una fuente de empleo para millas de trabajadores.
Air Europa tiene los días contados para estabilizar su situación financiera
Sin embargo, este rescate ha sido motivo de polémica desde el primer momento. Expertos y diversos sectores cuestionan la decisión de utilizar fondos públicos para mantener a flote una empresa privada, especialmente en un contexto de dificultades financieras en otros sectores. Los defensores del rescate argumentan que la quiebra de Air Europa tendría consecuencias drásticas para la conectividad aérea de España, en particular en rutas hacia América Latina, y afectaría al turismo y la economía en su conjunto.
Por otro lado, críticos del rescate cuestionan que el gobierno haya optado por salvar a una empresa privada en lugar de permitir que el mercado reestructure la situación a través de una venta o liquidación. Además, sugiere que la transparencia del proceso de ayuda no ha sido suficiente y que otras aerolíneas podrían haber asumido las rutas de Air Europa sin necesidad de un rescate que involucre el dinero de los contribuyentes.
Air Europa tiene los días contados para estabilizar su situación financiera. La moratoria que el Gobierno de Pedro Sánchez concedió sobre la norma que exige cumplir con ciertos requisitos para evitar la disolución empresarial finaliza en diciembre, lo que significa que la aerolínea necesita urgentemente restablecer su equilibrio patrimonial para asegurar su permanencia.
Sospechas y críticas por la relación con Begoña Gómez
Sin embargo, la deuda total de Air Europa, propiedad de la familia Hidalgo, se acerca a los 700 millones de euros. Con el plazo en 2026 para devolver el préstamo de 475 millones en fondos públicos que recibió de la SEPI durante la pandemia, además de otros 141 millones respaldados por el ICO, la aerolínea enfrenta una situación complicada.
Por lo tanto, la ampliación de capital parece ser la única opción viable, ya que se descarta que la SEPI vaya a refinanciar el elevado crédito debido al escándalo en el que se encuentra involucrada. Además, la relación de Juan José Hidalgo, presidente de Air Europa, con Begoña Gómez ha escalado hasta los tribunales generando un gran revuelo.
La polémica surge porque Begoña Gómez había sostenido reuniones en la sede de Globalia con Javier Hidalgo antes de que se aprobara el rescate a Air Europa. Globalia, en colaboración con la OMT, había fundado Wakalua. Una sociedad que respaldaba el trabajo de Begoña Gómez en el Africa Center. De hecho, Wakalua había lanzado una incubadora de empresas junto con el mismo Africa Center, dirigida por la esposa del presidente del Gobierno. Posteriormente, Air Europa recibió el rescate, lo que ha levantado muchas sospechas y críticas. Mientras tanto, la amenaza de quiebra acecha a Air Europa, y las probabilidades de que la SEPI termine asumiendo el control de la aerolínea si no logra hacer frente a sus deudas están en aumento.