Desvela Josean Izarra en El Mundo que el defensor del pueblo del País Vasco ha advertido al Gobierno que preside el nacionalista Iñigo Urkullu que “no puede proceder al sistemático traslado de presos comunes peligrosos a cárceles del resto de España”. Esto tras analizar la denuncia de un preso que fue trasladado desde la prisión de Zaballa (Alava) a la de Dueñas (Palencia).
El problema viene generado por el acercamiento a prisiones vascas de los terroristas de ETA que cumplían condena fuera del País Vasco. No hay sitio suficiente, al parecer, en las cárceles vascas. Y el Gobierno del PNV, para hacer sitio a los etarras, decide trasladar fuera del País Vasco a otros presos que no son terroristas. El argumento es que se trata de presos peligrosos. Ya me han leído muchas veces pronunciarme a favor de que se cumpla la Constitución y la legislación penitenciaria. De este modo, los presos cumplen sus condenas en las prisiones más cercanas a los domicilios de sus familias. También los etarras. Todos.
Presos vascos que son alejados de sus familias
Cuenta Izarra que la administración vasca está trasladando a Dueñas, de acuerdo con el Ministerio de Interior, a presos vascos conflictivos. El Gobierno de Urkullu reconoce ya que ha enviado fuera de Euskadi a 120 reclusos. Esto coincide en el tiempo con el traslado a Euskadi de los casi 100 etarras que estaban en otras prisiones de España.
Me parece inmoral e inaceptable que para hacer sitio a los etarras trasladen a otros presos vascos no terroristas lejos de sus familias. ¿Dónde están ahora los partidarios del acercamiento de los etarras? ¿Por qué no abren la boca? ¿Se trataba de que se cumpliera la Ley o solo se trataba de que los etarras volvieran?
La Consejería de Justicia del Gobierno vasco y el ministerio de Grande Marlaska han alcanzado un compromiso para que el Gobierno vasco habilite en la prisión de Zaballa un módulo de seguridad en 2024. Hasta entonces, los etarras han sido acercados a Euskadi. Aunque para ello han sido alejados más de cien presos vascos, que por no ser terroristas, se ven alejados de sus familias. Urkullu se aprovecha de que esos presos trasladados con el argumento de que son peligrosos ni disponen del apoyo de ningún partido político. Qué vergüenza. Que indignidad. Y, por cierto, no creo que ninguno de los trasladados sea más peligroso que la mayoría de los etarras que ahora si pueden cumplir sus condenas en las prisiones vascas. Para peligrosos Urkullu y Marlaska.
