El fugitivo Carles Puigdemont quiere que los debates electorales para las elecciones catalanas del 12 de mayo que habitualmente hacen la televisión y la radio autonómica se celebren en Francia, donde reside actualmente. Una vez conocida la petición, Salvador Illa, candidato del Partido Socialista de Cataluña (PSC), dijo que bajo ningún concepto acudiría a los debates de TV3 y Cataluña Radio si se hacen en Francia.
La propuesta de TV3 y Cataluña Radio me parece coherente con las políticas de Junts y el entreguismo de los medios públicos catalanes, que sirven como esclavos a Puigdemont. Y, a ratos a ERC, siempre despreciando a los catalanes no independentistas. Y como lo que esos medios pretenden es favorecer a Puigdemont y saben que Puigdemont no podría acudir si los celebran en Barcelona, se muestran dispuestos a plegarse a la petición del fugitivo.
La batalla entre Puigdemont y Sánchez
Lo que me resulta paradójico es que Illa y su PSC se nieguen a hacer el debate en Francia cuando llevan meses ellos y el PSOE de Sánchez reuniéndose y pactando en Waterloo y en Suiza, en reuniones secretas a las que, eso sí, asiste un mediador salvadoreño. Me parece incoherente que acepten reuniones secretas fuera y que no acepten un debate público. Y muy indicativo de por dónde van las cosas en Cataluña y en España.
Puigdemont, al anunciar que si no sale elegido como presidente de la Generalidad abandonará la política activa, ha lanzado un órdago que convierte las elecciones de mayo en un plebiscito. Y, a la vez, en un duelo a muerte entre él y Pedro Sánchez. Si, no Illa, Pedro Sánchez.
No he visto una sola encuesta que le otorgue la victoria a Junts, por lo que para ser investido presidente de la Generalidad, tendrá que sacar más votos que ERC, y convencer a la CUP para que le hagan presidente. Salvador Illa aspira a poder reeditar un gobierno con ERC y los Comunes, consciente de que para que ello sea posible tendrá que aceptar un referéndum de independencia. Pero la batalla de Puigdemont, insisto es con Sánchez.
Si Puigdemont no es investido y se retira de la política, Sánchez podrá sobrevivir, ya veremos cuanto. Pero si el fugitivo consigue su objetivo Sánchez será un muerto viviente en la política, porque es evidente que la amnistía a cambio de los siete votos de los de Puigdemont habrá sido la gasolina que habrá permitido al fugitivo llegar a la presidencia de la Generalidad.
A ver como acaba lo de los debates catalanes
Ya veremos cuando entra en vigor la amnistía, que Puigdemont ya da por descontada, porque los indepes ya estan con el referéndum de independencia, hasta el punto de que ERC, por boca del presidente Pere Aragonés, ya dijo en el Senado, con cara de os tenemos pillados por salva sea la parte, que habrá referéndum como hubo indultos, como cayó el delito de sedición y como lograron la amnistía. En la enésima humillación a Sánchez y su ejército de conmilitones ciegos de obediencia perruna. Si Puigdemont es investido e Illa se queda liderando la oposición en Cataluña, después llegarán las Europeas, donde es previsible que el PSOE se pegue un buen batacazo, lo cual obligaría a Sánchez a convocar generales.
Y antes de las catalanas están las vascas del próximo fin de semana. Y, ojo, que si gana Bildu, cosa probable, aunque el PSOE le de el gobierno al PNV, ahí comenzará la debacle de Sánchez y el PSOE, que ya ha renunciado a ser un partido nacional, y a lo que aspira es simplemente a ser muleta de nacionalistas de diferente pelaje. En Galicia prácticamente desapareció aupando al BNG. En el País Vasco le dará el gobierno al PNV del tal Pradales, pero sabedor de que la factura de Bildu para seguir gobernando en España va a ser cara, muy cara, carísima.
A ver como termina lo de los debates catalanes. Si se hacen en Francia, bien para Puigdemont, que se los habrá llevado al huerto de nuevo. Si se celebran en Barcelona sin el fugitivo, munición para él, para presentarse como víctima y para impugnarlos por su ausencia. Este panorama un tanto desolador es nuestro panorama.