¿Cuál es la palabra más poderosa que podemos pronunciar? ¿Alguna vez te has hecho esta pregunta? Así, a bote pronto, la primera que te podría venir a la mente tal vez fuera “amor”, si eres un ser humano de altas vibraciones, o “dinero” si eres un ser humano que tiende a la baja vibración. Ambas son aceptables y muy poderosas. Sin embargo la que te propongo yo, engloba las dos mencionadas y muchas más. Esta palabra no es otra que ¡SÍ!
Pronunciar un SÍ a la vida abre las puertas de tu interior y expande tu luz por doquier. Porque tú SÍ eres único, tú SÍ te mereces la felicidad, tú SÍ tienes el poder supremo dentro de ti, tú SÍ puedes vivir en un mundo lleno de amor, donde SÍ exista la libertad, la paz y la concordia.
El poder del sí
SÍ es una palabra increíblemente poderosa, incluso a la hora de estar en desacuerdo con algo o con alguien, porque utilizar la palabra SÍ a la hora de negar algo es un acicate para avanzar, es el combustible que nos empuja a crear nuevos caminos y a caminar por ellos, sin menospreciar los ya existentes. Utilizar el SÍ en una negación es proponer alternativas para avanzar.
El mundo que nos rodea nos ha enseñado a olvidar esta palabra tan maravillosa: ¡SÍ!, en detrimento de otras con connotaciones que nos impiden evolucionar como seres mágicos y poderosos que somos. Esto hace que nos veamos como un pedazo de carne, vísceras y huesos y nada más lejos de la realidad. Nosotros SÍ somos grandes, nosotros SÍ albergamos un gran poder en nuestro interior, lo único que tenemos que hacer es ser conscientes de este hecho, pronunciar la palabra mágica y crear el mundo que deseamos. ¡Lo tenemos en la palma de la mano! ¡SÍ!