Carla

Tantas veces me he preguntado por qué Carla está conmigo y jamás he sabido darme una respuesta… Sus ojos azules de una belleza lánguida y misteriosa encierran una tristeza que nunca he podido descifrar. Su piel está inusitadamente limpia de marcas, tatuajes o pearcings, pero a mí siempre me ha parecido un campo de batallas cruentas, un lienzo de cicatrices invisibles a los ojos.

Sé que adora la ternura con que le hago el amor. La desnudo con la parsimonia de quien abre un regalo del que quiere conservar hasta el papel que lo envuelve. Un regalo siempre nuevo por más que se trate del mismo cuerpo. Beso sus labios entreabiertos. Beso su vientre seco. Beso sus muslos prietos. Beso su cuello dulce. Besos sus pechos trémulos. Beso su sexo hambriento… Y percibo como mis besos la reconfortan y aquietan ese algo cruel que aguijonea su alma y se asoma a  esos ojos azules tristes que yo tanto amo.


Carla y el después de mí

La penetro con dulzura y sus ojos se cierran por un instante al tiempo que su espalda se arquea y un gemido escapa de su boca. Y yo solo espero a que se obre el milagro nuevamente, el que siempre sigue al instante de anidar en su interior, el que me mantiene unido a ella por más que no pueda comprenderla.

Carla.
Fotografías © Mario Díez

Cuando los vuelve a abrir y me buscan, ya no hay rastro de dolor en su mirada. Los fantasmas que la acechan se han retirado y solo existimos nosotros. Y entonces sonríe y me rodea con sus brazos. Y me pide que la ame y que la folle a intervalos. Y enloquece y me enloquece…

Pero cuando el sexo termina, el milagro se extingue. Las sombras se ciernen de nuevo en torno a su piel y la melancolía reconquista sus ojos arrebatándome su mirada.

A veces la espío mientras se ducha, observo en silencio como llora contraída y camuflada en el agua que recorre su cuerpo, y siento el dolor que la aflige tan mío que me cuesta respirar. Y no sé qué hacer. Y me doy cuenta de que esa mujer fascinante que se entrega a mí cada fin de semana desde hace ya casi un año, es una completa desconocida. Y entonces yo también lloro, contraído y camuflado.

Tantas veces me he preguntado por qué Carla está conmigo y jamás he sabido darme una respuesta…


*La Colección de relatos “Ell@s” se compone de 52 relatos, ilustrados con fotografías del propio autor, que se publicarán semanalmente durante un año, referidos a 26 situaciones relacionadas con el amor, el desamor, la amistad, el sexo, la pérdida, el dolor, la vida… y que serán abordadas desde el punto de vista del hombre y desde el punto de vista de la mujer protagonistas del relato. Los nombres de ellas (26) irán de la “a” a la “z”, y los de ellos (26) de la “z” a la “a”. Próximo relato: “Xavi”


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